El Sea Stallion zarpó del puerto de Roskilde (Dinamarca) el 1 de julio y llegó ayer a Dublín. Este barco es una réplica de los navíos que empleaban los vikingos en sus incursiones a lo largo del Mar del Norte. Con motivo de este evento, el ministro danés de cultura, Brian Mikkelson, pidió disculpas por la invasión de Irlanda perpetrada por sus ancestros:
«En Dinamarca estamos muy orgullosos de este barco, pero no lo estamos del daño causado a los irlandeses por aquellos que viajaban en él. Pero el calor y la amistad con la que nos recibís hoy son una muestra de que, afortunadamente, todo ha sido perdonado«.
Tras mes y medio de travesía, esta réplica del Skuldelev 2 (construido en Dublín en 1042) subió por el río Liffey, escoltado por una flotilla de barcos, botes y curraghs. A su paso por Christchurch Cathedral las campanas sonaron en señal de bienvenida. El barco permanecerá en el Museo Nacional hasta el próximo verano, cuando surcará los mares en su viaje de regreso.
Hay que ver…
Érin go bragh 